A la hora de elegir las zapatillas para montar no importa si eres principiante o profesional,
estos integrantes de tus accesorios de ciclismo son el contacto directo con tus pedales y pueden ahorrarte muchos dolores de cabeza (o de pies).
¿A qué se debe lo anterior? ¡Te explicamos! Existen tres puntos de contacto con tu bicicleta al montar: el sillín, el manubrio y los pedales; si estos tres componentes están alineados y te brindan comodidad, el resultado será un excelente rendimiento, pero si solo uno de ellos está desajustado o no cumple con lo necesario, incluso tu salud se verá afectada.
Por esta razón, cada modalidad de ciclismo exige un tipo de zapatillas, como es el caso de las zapatillas para ciclismo de ruta que poseen unas cualidades específicas para este tipo de terreno como lo son mayor ventilación y rigidez; y así mismo, las zapatillas de MTB o ciclismo de montaña incluyen refuerzos y acolchados para amortiguar el rebote durante el recorrido.
Las calas aportan un impulso extra al rendimiento de tus pedaleadas, si tus pies están perfectamente alineados con los pedales, tu fuerza se transferirá de la manera más eficiente.
Dependiendo de la modalidad, se usan unas calas con determinadas características. Por ejemplo, en el ciclismo de ruta normalmente se usan calas de tres pernos para fijarte, mientras que en el ciclomontañismo es recomendable usar dos pernos o un sistema Clipless para que caminar y desmontarte sean procesos más sencillos.
¿No sabes por dónde empezar?
Entonces te recomendamos que el primer paso sea visitar nuestro blog. Y como más arriba hablamos de la importancia de contar con un sistema integrado y completo de componentes a la hora de montar, el segundo paso puede ser consultar nuestra guía para elegir los pedales correctos.
- Recuerda que con nuestra guía para mejoras de bicicletas de Ruta y MTB te damos un abre-bocas de los demás accesorios que debes llevar contigo cada que montes.
¡Quiero mis zapatillas!